Un nuevo ataque por parte de rugbiers tuvo lugar en Tucumán el día sábado. Durante una fiesta after, un amigo de la víctima era retirado del lugar por personal de seguridad, fue en ese preciso momento que Oscar, quien quiso calmar la situación, recibió una violenta trompada que lo tumbó al suelo dejándolo inconsciente.
Lo que vino luego, fueron patadas de varios sujetos que iban directo a la cabeza del joven, “solo una mente asesina podían haber hecho esto”, dijo a Radio del Plata Tucumán, Sonia Ramasco Padilla, la mamá de la víctima, que dialogó con el periodista Exequiel Rodríguez en el programa Actualidad.
El joven sufrió la fractura de su nariz y con un ojo muy comprometido “que gracias a Dios lograron salvarlo, detalló la mamá de Cucho”, como le dicen cariñosamente el circulo de amigos de Oscar.
Según trascendidos, los agresores serian jugadores del Club Universitario y tiene como diversión golpear en patota a quien se les cruza por su camino.
Por su lado, la víctima, estudiante de Agronomía y también jugador de rugby, evoluciona favorablemente pero con el trauma de haber pasado por una verdadera pesadilla.
Hechos como estos, por jóvenes violentos, empañan un deporte tan noble que inculca buenos valores como el Rugby.
fuente:losprimeros