El ex rector y el ex diputado nacional van a juicio por administración fraudulenta en la administración de los fondos que recibió la UNT por regalías mineras entre 2006 y 2009.
Cerisola está acusado por administración fraudulenta e incumplimiento de los deberes de funcionario público, y también han sido imputados sus ex funcionarios Luis Fernando Sacca (ex subsecretario Administrativo), Olga Cudmani (ex directora de Construcciones Universitarias) y Osvaldo Venturino (ex director de Inversiones y Contrataciones).
El juez Federal II, Fernando Poviña, rechazó las oposiciones de las defensas, clausuró la investigación y elevó la causa a juicio oral.
En otra resolución, el juez rechazó la acusación contra Cerisola por la desaparición de un cheque por $ 20,2 millones y dictó el sobreseimiento del ex rector.
La causa se originó en una denuncia del arquitecto Ramón Eudal en 2010, a propósito de las obras que la Universidad estaba realizando con los fondos mineros, que habían comenzado a llegar a comienzo del decenio en virtud de lo contemplado por la ley 14.771, de creación de los Yacimientos Mineros Aguas de Dionisio (YMAD).
Por esa norma a la UNT le corresponde el 40% de las regalías mineras para que sean usados en la finalización de la Ciudad Universitaria.
Una vez concluida, le quedarían a la UNT el 20% de las regalías, de libre disponibilidad, y el otro 20% debe ir al resto de las universidades nacionales.
El 2 de enero de 2008, Cerisola firmó un acta con el directorio de YMAD en la que se declaró concluida la Ciudad Universitaria. Con ello quedaron los fondos de libre disponibilidad.
La denuncia de Eudal, luego ampliada con una denuncia de Oscar López ante la Sindicatura General de la Nación (Sigen) y también con otra denuncia anónima, determinó una investigación del fiscal federal Carlos Brito, que abarcó tanto presuntos sobreprecios en la realización y/o refacción de 13 obras en predios universitarios como la colocación de dinero en plazos fijos en entidades financieras .
También, la disminución del porcentaje que debía recibir la UNT respecto del dinero proveniente de YMAD, y la falta de control de esas remesas de dinero.
En la investigación fueron muy llamativas las presuntas irregularidades en obras realizadas en una casa de la reserva de Horco Molle, en la refacción de la Facultad de Derecho y en una obra en la Facultad de Filosofía y Letras.
Hubo en la pesquisa intervenciones de la Sigen (auditoría interna), Gendarmería (supervisión de 20 obras) y Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac).
Cerisola había dictado tres resoluciones (365, 366 y 367/08), que ponían a Construcciones Universitarias bajo dependencia directa del Rectorado y que permitían que los fondos de YMAD no fueran usados bajo la Ley de Obras Públicas N° 13.064.
Las tres resoluciones, así como el acta acuerdo del 2/1/08, fueron rechazadas después por el Consejo Superior.
fuente: losprimeros