Misiones prohibió el uso del polémico herbicida glifosato, pilar del modelo de agronegocio actual, y provocó rechazos en todo el país.
A partir de 2025 estará prohibido el uso de glifosato en Misiones. La provincia sancionó la ley de Promoción de Bioinsumos y en uno de sus artículos establece un periodo de dos años para eliminar el uso de herbicidas.
Se convirtió así en la segunda provincia en prohibir el uso de este polémico herbicida que es pilar del modelo de agronegocio actual. Chubut fue la primera. Allí la prohibición total rige desde 2020.
Según explicó la ministra de Agricultura Familiar de Misiones, Marta Ferreira, la normativa es producto del trabajo de 20 años y de numerosas políticas públicas que apuntan a modificar integralmente la agricultura en la provincia.
“Obvio que aparecen algunas voces que no están de acuerdo. Pero es un cambio de paradigma y cuando eso pasa en la historia de la humanidad, uno encuentra posturas distintas. El gran compromiso que tenemos es con las generaciones que vienen”, reflexiono Ferreira en diálogo con ‘AM 750’.
Además, contó que la biofábrica de la provincia desarrolló un bioinsumo a base de un hongo local que ya cuenta con la certificación del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa). Sumado a esto, una empresa agrosustentable comenzó con el desarrollo de fertilizantes e insecticidas orgánicos y desde el Ministerio que conduce Ferreira crearon una escuela en la que enseñan a agricultores a desarrollar sus propios biopreparados.
“Es cuestión de buscar alternativas, como lo está haciendo la yerba mate que comenzó a transitar la agroecología en la provincia. Es posible”, concluyó la ministra.
La norma que lo establece es la nueva Ley de Promoción de Producción de Bioinsumos, que sancionó la Legislatura y que integra una serie de medidas de investigación, optimización y promoción de insumos biológicos, gestión del riego y uso del agua eficiente, y el desarrollo sustentable de cultivos. El proyecto de ley fue presentado por los diputados Carlos Rovira (Frente Renovador de la Concordia), Martín Sereno (Tierra, Techo y Trabajo) y Marta Ferreira, actual ministra de Agricultura Familiar de la provincia.
Rechazos del agronegocio
Pero a las pocas horas de la sanción de la ley en la Legislatura misionera, el espacio Juntos por el Cambio Misiones emitió un comunicado en el que caracterizan como “una imposición” a la prohibición del glifosato, posición que sintoniza con las expresiones de la Sociedad Rural, Coninagro y la Federación Agraria Argentina. “Es un embate a la producción que atenta contra lo que necesita el país: más desarrollo económico para construir una nueva Argentina con mayores posibilidades”, manifestó el presidente de la Sociedad Rural Argentina, Nicolás Pino. “No fuimos consultados, sino que tampoco nos permitieron participar en la Comisión a pesar de haber insistido permanentemente, lo que demuestra un autoritarismo total y ausencia de diálogo”, lamentó el comunicado difundido en forma conjunta por las entidades ruralistas que integran la llamada Mesa de Enlace. Fueron, en efecto, fueron varias las confederaciones y asociaciones de diversos puntos del país las que se solidarizaron con sus pares misioneros, y además preparan una movilización “pacífica” para que el gobernador vete la normativa, que -afirman- podría complicar la producción en numerosas explotaciones de yerba mate, té y otras economías regionales de esa región. La protesta la anunció el productor misionero Adrián Luna Vázquez, vocal titular de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), según consignó la cuenta de CRA en ‘Twitter’.
Apoyo federal
En este marco, CRA también compartió el apoyo y solidaridad hacia los productores misioneros, desde diversas puntos del país.
La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), recordó que por las características particulares que tiene la producción en Misiones, es imposible combatir las malezas de otra manera que no sea la aplicación de fitosanitarios
Y manifestó que “cualquier intención de transición a sistemas sustentables o biocontrolados, por parte del Gobierno, debe hacerse buscando acuerdo y consensos, y no imponiendo unilateralmente plazos, sanciones y hasta productos a utilizar”.
Otro reclamo de peso partió desde la Confederación de Asociaciones Rurales de Santa Fe (Carsfe), que consideró a esta política como ” un ataque directo a la producción agropecuaria y un grave antecedente para todo el país productivo”.
Los ruralistas santafesinos recordaron, además, que el glifosato cuenta con aprobación de los organismos sanitarios de Argentina, luego de haber superado todas las pruebas relacionadas con su uso racional y especializado
El Glifosato
En 1970, el glifosato fue reformulado, testado y patentado por la empresa Monsanto para su utilización como herbicida. La patente expiró en el año 2000 y hoy este pesticida es producido a nivel mundial por un elevado número de fabricantes
En 1996 aparecieron los primeros vegetales modificados genéticamente, creados para tolerar el uso de este herbicida. Desde entonces las ventas del glifosato no han dejado de aumentar, convirtiéndose en el herbicida más vendido en el mundo por su eficacia y reducido costo. Pero el uso del glifosato conlleva graves problemas de contaminación, por su toxicidad para el medio ambiente y para la salud humana.
En 2015, la Organización Mundial de la Salud (OMS) confirmó que el herbicida glifosato produce daño genético en humanos y lo recategorizó como probable cancerígeno (segundo en una escala de 1 a 5)
Desde entonces, las evidencias científicas de los perjuicios del uso de esta sustancia no han dejado de crecer. Hace poco, por ejemplo, Pesticide Action Network Europe publicó un informe que concluye que el glifosato es tóxico para las abejas y otros insectos.
Otros estudios sugieren que la exposición humana al glifosato puede causar la modificación del correcto funcionamiento del sistema hormonal, la enfermedad de Parkinson y alteraciones de la microbiota, que puede conducir a la supresión del sistema inmunitario
A consecuencia de ello, se vienen aprobando en distintas partes del mundo el dejar de utilizar este herbicida en parques, calles y lugares concurridos, pero en el sector agrario no siempre ocurre lo mismo, y muchas veces, todo lo contrario. En Argentina, en particular, se aplica glifosato en los campos de soja, maíz y algodón (todos cultivos transgénicos). También se utiliza en cítricos, frutales de pepita (manzana, pera, membrillo), vid, yerba mate, girasol, pasturas, pinos y trigo. Cierto es que, como se mencionó, a partir del avance transgénico, aumentó geométricamente el uso del glifosato. Entre las empresas que comercializan glifosato en Argentina figuran Bayer-Monsanto, Syngenta, Red Surcos, Atanor, Asociación de Cooperativas Argentinas, Nufram, Agrofina, Nidera, DuPont, YPF y Dow. “Antología Toxicológica del Glifosato +1000”, es el título de un trabajo, de 270 páginas, recopilado por el técnico en inmunoterapia y epidemiología Eduardo Martín Rossi y editado por la ONG Naturaleza de Derechos donde detallan 1108 trabajos científicos que dan cuenta de los efectos nocivos del agrotóxico en el ambiente y la salud. Todas las investigaciones fueron sometidos a revisión por un comité de científicos o pares, y aprobados para su publicación académica. En Misiones, la provincia de mayor producción de yerba mate y té a nivel nacional, ya rige la prohibición de fumigaciones aéreas con agroquímicos. Un antecedente normativo ineludible en materia de restricción al uso de glifosato y otros herbicidas tuvo lugar en la ciudad norteña de Montecarlo, donde en el 2012 se sancionó una ordenanza municipal que prohibió “la aplicación de agroquímicos, llámese glifosato y cipermetrin y otros herbicidas usadSegún medios locales, en esa provincia resultaron fundamentales los aportes científicos y sociales del ya fallecido médico e investigador Hugo Gómez Demaio, quien llevó adelante las primeras investigaciones que, en Misiones, pudieron determinar los severos daños que el uso de agroquímicos ocasionaba en niños de zonas rurales, especialmente en la cuenca tabacalera: “Demaio falleció el 7 de julio de 2017, pero su legado dejó una huella indeleble en la lucha contra los agrotóxicos y en defensa de la salud de las poblaciones rurales”.os para la eliminación de pastizales y otras especies vegetales en todos los predios ubicados en el municipio”.
fuente:urgente24