La Policía Federal concluyó que Jair Bolsonaro tenía “pleno conocimiento” del plan para asesinar al presidente Lula da Silva, a Geraldo Alckmin y Alexandre de Moraes.
Este jueves (21/11) La Policía Federal (PF) de Brasil determinó que Jair Bolsonaro tenía “pleno conocimiento” del complot para derrocar y matar al presidente Lula da Silva, al vicepresidente Geraldo Alckmin (PSB) y al ministro Alexandre de Moraes, del Tribunal Supremo Federal (STF), en el marco de la investigación que indaga un presunto intento de golpe de Estado por parte del expresidente Jair Bolsonaro y su entorno el 8 de enero de 2023.
Se espera que La Policía Federal de Brasil presente durante el día la acusación formal contra el expresidente Jair Bolsonaro. La PF ya había considerado tener elementos para procesar al expresidente desde junio. El resultado de la investigación deberá ser entregado este jueves (21) al Supremo Tribunal Federal (STF), según CCN Brasil.
El martes (19/11) la Policía Federal de Brasil detuvo a uno de sus miembros y a militares de élite del ejército por planear un golpe de estado y el asesinato de Lula da Silva en 2022. Entre las acciones preparadas por el grupo estaba una “planificación operativa detallada, denominada ‘Daga Verde y Amarilla’, que sería ejecutada el 15 de diciembre de 2022” para matar al entonces electo presidente Lula, y al vicepresidente. Geraldo Alckmin e incluso al máximo ministro del Tribunal Supremo de Justicia Alexandre de Moraes.
nvestigación
Los arrestados el general de reserva Mario Fernandes y los tenientes coroneles Hélio Ferreira Lima, Rafael Martins de Oliveira y Rodrigo Bezerra de Azevedo, todos vinculados a las fuerzas especiales pertenecía a “Kids Pretos” (tropas de élite de la Fuerza), una compañía especial del Ejército encargada de operaciones de guerrilla y guerra irregular.
Las detenciones se han llevado a cabo gracias, en parte, al contenido de los mensajes que intercambiaron algunos militares con quien fuera mano derecha de Bolsonaro, Mauro Cid, quien pasó varios meses en prisión por su implicación en una supuesta trama para falsificar datos de vacunación contra la Covid-19. El testimonio Mauro Cid, ex ayudante de campo de Bolsonaro, brindado el martes fue el último para que se finalice la investigación sobre el complot golpista.
El operativo denominado “Contragolpe” de la Policía Federal de Brasil fue autorizado como parte de la investigación que indaga el intento de golpe de Estado y la secuencia de actos antidemocráticos promovidos a lo largo del proceso electoral de 2022, y que culminaron con los actos terroristas del 8 de enero de 2023 cuando cientos de fanáticos invadieron la sede del Congreso Nacional, el Palacio presidencial de Planalto y el edificio del Supremo Tribunal Federal (STF) el 8 de enero 2023 en una violenta manifestación en la que exigieron una intervención militar para derrocar al presidente Luiz Inácio Lula da Silva, a una semana de su asunción.
Tal como contó Urgente24, el plan para matar a Lula fue discutido en la casa del general retirado Walter Braga Netto, donde barajaron la posibilidad de un en “envenenamiento o uso de químicos para causar un colapso orgánico”. Netto fue vicepresidente de la derrotada candidatura de Jair Bolsonaro (PL) en las elecciones presidenciales de 2022 y había sido ministro de la Casa Civil y de Defensa del gobierno. Estuvieron presentes en la reunión, además del anfitrión,
el teniente coronel Mauro Cid,
el mayor Rafael de Oliveira y
el teniente coronel Hélio Ferreira Lima.
Según el diario Folha de Sao Paulo, el debate gira en torno a la cuestión de qué conductas investigadas dejan de ser actos preparatorios de un delito –no punible– y se convierten en una tentativa de cometerlo.
FUENTE:URGENTE24