Los hombres se destruyeron los vidrios de los autos. Uno de ellos fue trasladado a la comisaría y otro al hospital.
Dos taxistas quisieron dejar su taxis en el mismo lugar pero sólo había espacio para uno. Así comenzó la discusión entre ambos, que terminó con un nivel de violencia extrema hoy, en Maipú y Santiago, en el microcentro tucumano.
Los choferes se destruyeron los vidrios de los coches y luego, uno de ellos sacó un fierro y le partió la frente al otro.
El agresor fue trasladado a la comisaría primera y el chofer que fue golpeado, a un hospital, según informaron fuentes policiales.
No es la primera vez que ocurren situaciones violentas por causas mínimas. A principio de año, taxistas y municipales terminaron a pedradas una discusión, mientras que, a fines del año pasado, un taxista chocó a un varita en Yerba Buena y luego lo golpeó.
fuente:LA GACETA