El papa Francisco entró en procesión en la Basílica de San Pedro, donde hoy en ocasión del Viernes Santo preside la celebración de la Pasión del Señor, que conmemora el calvario de Cristo antes de la crucifixión.
Ayer, el Papa lavó los pies en una cárcel de las afueras de Roma a doce detenidos, entre ellos varios arrepentidos de la mafia, en ocasión del rito del Jueves Santo.
“Todos somos pecadores, todos tenemos nuestros límites y nuestros defectos”, reconoció el papa Francisco ante los presos de la cárcel de Paliano, en Frosinone, no muy lejos de la capital italiana.
El tradicional rito fue celebrado en forma privada y sin la presencia de cámaras de televisión, precisó el Vaticano.
Desde que fue elegido pontífice en 2013, el Papa ha aprovechado el rito del Jueves Santo, que conmemora la última cena de Jesús con los doce apóstoles antes de ser arrestado y condenado a muerte, para visitar cárceles y enfermos, tal como lo hacía en Argentina.
La Semana Santa este año empezó en forma amarga para los católicos por los atentados en Egipto reivindicados por el grupo Estado Islámico yihadista (EI) contra dos iglesias coptas y que causaron la muerte de 45 personas.
A pesar del clima de inseguridad, el papa confirmó su viaje a Egipto del 28 y 29 de abril.
fuente: AMBITO