Ante los positivos de Martínez Quarta y Camilo Mayada, la Conmebol resolvió que todos los que jugarán ante Guaraní deberán someterse al control.
Pasó el escándalo de los controles positivos de dopaje que sufrió River Plate, pero el clima sigue tenso en su contexto. Tras las disputas dirigenciales con los que toman decisiones en el elenco paraguayo, se sumó un nuevo capítulo a la novela.
Conmebol resolvió que todos los futbolistas de River que jueguen el partido ante Guaraní tendrán que realizarse el control antidoping, amparados en el reglamento por tener dos jugadores que dieron positivo en la competencia.
El comunicado oficial:
La Confederación Sudamericana de Fútbol informa que, conforme a la aplicación del Reglamento Antidopaje de la CONMEBOL vigente, el día de hoy, la Unidad de Antidopaje de CONMEBOL notificó al Club Atlético River Plate que todos sus jugadores han sido seleccionados para la realización de controles dirigidos en competición de acuerdo a lo establecido en el Procedimiento de Control.
La decisión de la Unidad Antidopaje de la CONMEBOL se basa en la aplicación del Art. 12, Apdo. 2 del Reglamento Antidopaje de la CONMEBOL vigente, que estipula:
“Los controles dirigidos se basarán en una evaluación juiciosa de los riesgos del dopaje y el uso más eficaz de los recursos para asegurar una óptima disuasión y detección. En el fútbol, como deporte colectivo, los controles dirigidos se realizarán principalmente para detectar el dopaje sistemático en un equipo. Si más de un jugador de un equipo ha dado positivo, se realizarán controles dirigidos de todos los jugadores. Para un jugador en concreto, se puede realizar el control dirigido por un comportamiento que denote dopaje, parámetros biológicos anómalos (parámetros sanguíneos, perfiles esteroideos, etc.), lesiones o el incumplimiento reiterado de proporcionar información sobre la localización del jugador, el historial de controles del jugador y el momento de rehabilitación de un jugador tras un periodo de suspensión.”
Cabe recordar que durante el mes de junio de 2017, la Confederación Sudamericana de Fútbol notificó al Club Atlético River Plate que había detectado resultados analíticos adversos en los controles de dopaje no dirigidos realizados a dos de sus jugadores.