Un paciente de 42 años que padece mal de Parkinson fue operado en el Hospital Padilla, en una intervención para aliviar los síntomas de la enfermedad en el sistema motriz. Se trata de la segunda cirugía de este tipo que se realiza en el sistema público de salud.
El Parkinson es una enfermedad degenerativa que ataca todo el sistema nervioso y puede ser muy incapacitante para el paciente. La cirugía para aliviar estas manifestaciones es muy costosa, por eso se vuelve fundamental su realización en el sistema público.
Según explica el neurocirujano Martín Paiz, que estuvo a cargo de la intervención, esta “consiste en la colocación de electrodos a nivel de núcleos profundos en el cerebro y a esos electrodos los conectamos con una batería que emite pulsos y modula de una determinada manera los núcleos basales del cerebro”. De esta manera, se puede mejorar la calidad de vida de los pacientes y de sus familias.
Si bien los electrodos no van a curar la enfermedad, sí ayudan a mejorar hasta un 80% de los síntomas y esta mejoría es tan evidente que la persona puede llevar una vida normal”, explica Paiz e indica que el procedimiento puede aplicarse a otras patologías motrices.
Es importante destacar que no todos los pacientes que padecen Parkinson tienen indicación quirúrgica. Para determinar si alguien es pasible de ser operado, el hospital cuenta con un grupo de trabajo multidisciplinario (neurólogos especialistas en movimientos anormales, un neurocirujano funcional, neuro psicólogos, imagenólogos) que controla y trata al paciente. Si presenta complicaciones con la medicación a largo plazo y tiene buena respuesta al medicamento aislado eficaz en el tratamiento de la enfermedad de Parkinson (levodopa) es candidato para una cirugía.