El jefe regional educativo 9 de la provincia de Buenos Aires, Carlos Marcos, reconoció hoy que fuerzas de Gendarmería Nacional tomaron fotos durante una protesta de alumnos y docentes en una escuela de Moreno que reclamaban reformas edilicias, aseguró que se abrió un sumario para investigar lo ocurrido, pero negó que los uniformados hayan ingresado al establecimiento como denunciaron padres de los estudiantes.
La protesta tuvo lugar ayer en la escuela Media Número 6 Juana Azurduy, de la localidad bonaerense de Moreno, y participaron alumnos, padres y docentes.
“El inspector de la escuela estaba presente ante el reclamo de los padres y alumnos y no permitió el ingreso de las fuerzas de la Gendarmería, pero nos comentó que ante la negativa comenzaron a sacar fotos desde la vereda de enfrente aunque no me consta que solicitaron datos”, dijo hoy a Télam Marcos.
El jefe regional desestimó que desde la Dirección General de Cultura y Educación se haya solicitado la presencia de alguna fuerza de seguridad y refirió que luego de las quejas de los padres en reclamo por mejoras edilicias se presentó el inspector de la cartera educativa provincial para corroborar las falencias de las obras y convinieron retomar los arreglos.
“Los arreglos de esta escuela se encuentran pendientes desde el año 2013 debido a que ninguna empresa quiso tomar la licitación”, dijo el jefe regional, quien aclaró que desde la Dirección de Infraestructura se trabajará en linea con la cartera educativa para solicitar un fondo de emergencia y concretar las obras en el corto plazo.
La autoridad educativa confirmó, además, que elevaron un informe a la subsecretaría de Educación y desde esa área “están llevando adelante acciones para establecer las responsabilidades que correspondan”.
“Los chicos no estaban cometiendo ningún delito con lo cual la intervención de la Gendarmería debería haber estado basada en una orden judicial y en una explicación que nunca existió. Es un atropello a sus derechos”, manifestó por su parte en un comunicado el intendente de Moreno, Walter Festa, quién adelantó que “realizará una presentación ante la Justicia para proteger los derechos superiores de las niñas, niños y adolescentes”.
“Nosotros estábamos protestando pacíficamente porque nuestra escuela se cae a pedazos y cortamos una calle, no una ruta, cuando de repente aparecieron dos autos con personal de Gendarmería y sacaron fotos a los chicos y pidieron datos porque dijeron que cometíamos un delito al cortar una ruta”, dijo a la prensa Miriam, madre de un alumno que asiste al establecimiento.
La mujer aclaró que los padres presentes durante el reclamo se negaron a brindar la información solicitada por las fuerzas de Gendarmería debido a que “ellos tampoco se identificaron previamente” y “entraron a la escuela para ver si lo que nosotros decíamos (sobre el estado del predio) era real”.
La escuela presenta agujeros en el techo, sectores que están en peligro de derrumbe, partes de pisos averiados e instalaciones eléctricas precarias, según padres y docentes.
fuente: mendoza post