Todos tenemos dos tipos de colesterol . Uno que ayuda al cuerpo a que funcione con normalidad (HDL), y otro que aumenta el riesgo de que las arterias se tapen (LDL). La licenciada en Nutrición Magdalena Errecaborde (M.N. 5972) da algunas recomendaciones para que podamos aumentar el bueno y disminuir el malo, solo cuidando qué comemos.
Además de chequear tus valores con el médico, sirve seguir estos tips:
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Elegir lácteos descremados versus los enteros.
Consumir cortes de carne magros.
Evitar la piel del pollo
Disminuir el consumo de fiambres, embutidos y snacks.
Moderar el consumo de panadería, pastelería y kiosco.
Consumir grasas saludables como aceites crudos, palta, frutos secos y semillas.
Hacer ejercicio.
No fumar.
Disminuir el estrés.
fuente: la nación
