“No es una competencia sobre quién ajusta más entre Nación y provincias”, apuntó Gerardo Morales.
Los principales distritos nacionales rechazan aplicar el ajuste fiscal que impulsa Mauricio Macri. Ni la Ciudad, ni la Provincia ni tampoco Jujuy, Corrientes o Mendoza están dispuestos a absorber los costos económicos de un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.
Desde el radicalismo aseguraron que es “imposible” plantear reducciones al empleo público, al menos en las provincias que gobiernan. En Jujuy hay 87 empleados públicos cada mil habitantes, en Corrientes son 58 y en Mendoza 42.
En diálogo con LPO un diputado nacional del radicalismo aseguró que no hay margen para “cargar el ajuste sobre el empleo público ni tampoco sobre la obra pública, es imposible”. Para Macri el empleo público local es el mayor causante del déficit nacional.
Según publicó el diario La Nación, desde los gobiernos de Horacio Rodríguez Larreta negaron que hubiera planes para absorber los subsidios que implican AySA, Edenor, Edesur o Metrogas para las cuentas nacionales.
La empresa de aguas abastece a Buenos Aires y a la Ciudad pero el dinero para su funcionamiento sale del presupuesto nacional. En la Casa Rosada vieron con buenos ojos la iniciativa que en los principales distritos que gobierna el PRO no tienen ninguna intención de aplicar.
Gerardo Morales fue uno de los voceros de la tesitura radical de que el ahorro fiscal no salga de las provincias.
En diálogo con Radio Nacional, Morales evitó en todo momento en hablar de ajuste de del empleo público. “Ya ha habido un ajuste de tarifas importante, yo creo que en ese punto ya está. Por eso de lo que hablábamos en la mesa política es de los esfuerzos que hay que hacer para que continúe la marcha de la obra pública con la Participación Público Privada”, explicó el mandatario jujeño.
La obra pública es uno de los principales caballitos de batalla de Macri, pero en los últimos meses comenzó a ralentizarse. En Mendoza ya comenzaron los problemas cuando la Nación le puso el freno de mano a la modernización de la Costanera.
Existe una cuestión estructural en la Argentina acerca de quien será el encargado de afinar el lápiz, si las provincias o el gobierno nacional. “No es una competencia sobre quién ajusta más entre Nación y provincias”, agregó Morales.
“Nosotros venimos haciendo nuestra parte. Ya hubo un pacto fiscal a fin de año, en el que se han establecido metas para todas las provincias, que estamos cumpliendo, que estamos bajando impuestos y ordenando las cuentas. Ya hay una hoja de ruta que hemos planteado entre los gobernadores con respecto a ese tema”, dijo sobre el acuerdo para atraer inversiones.
“Cada provincia tiene su realidad y tiene que tener su propio plan. Jujuy es la provincia que más empleo privado ha creado desde diciembre de 2015 y puede ser una de las provincias más ricas de la Argentina, pero bueno… Acá no hay provincias inviables”, apuntó el mandatario jujeño.
Sus palabras fueron en sintonía con los dichos de gobernadores peronistas como Juan Schiaretti, de Córdoba, y Juan Manuel Urtubey quienes pidieron que sea la Casa Rosada la que equilibre sus propias cuentas. De hecho el mandatario salteño aseguró que el 90% del déficit del país proviene de Nación.
En esa lógica existen mayores coincidencias entre los gobernadores peronistas, radicales y macristas que las que puede haber con el gobierno nacional. Incluso Morales aseguró que “no va a caer el plan de inversiones” del proyecto Belgrano Cargas, una de las obras emblema de la gestión Cambiemos.
fuente: LAPOLITICAONLINE