Un vecino de Bandera Bajada, en Santiago del Estero, habría accedido sexualmente al compañero de copas, aprovechando que cayó dormido tras beber casi una docena de cervezas.
El insólito incidente tuvo de epicentro una vivienda, punto de encuentro de un asado con chacareras y más tarde con el retumbar de cumbias.
Hasta ayer, los protagonistas eran compañeros de andanzas, tabeadas y fútbol.
Según la policía, bebieron desde la mañana hasta la tarde. Al promediar las 18, el anfitrión se quedó dormido y, con ello, despertaron los demonios internos del visitante. Previo cerciorarse que las cervezas lo habían dejado noqueado, el individuo le desabrochó el cinto y bajó el pantalón.
Acto seguido, comenzó a abusarlo sexualmente. Fue allí cuando el amigo reaccionó: abrió los ojos y descubrió al compinche en plena violación.
Urgente, la víctima se armó de una navaja y le provocó varios cortes en el cuello y a la altura del abdomen.
Mientras se levantaba el pantalón, y peleaba con la modorra, el damnificado continuó lanzando cortes al aire y recibió también cortes de parte del contrincante.
Dado a los gritos, terció un tercer amigo, incrédulo y desconcertado al contemplarlos semidesnudos, en la habitación y sangrando.
Actuó la policía
En media hora, acudió la policía y restableció el orden.
Cuando el patrullero apareció en la casa, los dos amigos esperaban tajeados en diferentes partes del cuerpo y aún con las consecuencias del alcohol.
Rápido, la fiscal Aída Farrán Serlé ordenó que fueran internados en el Hospital Regional, para suturar y frenar la sangre de las heridas.
Hoy, el cielo asomará más claro. Y los pacientes definirán si quieren denunciar algo.
fuente: los primeros