La producción total fue de 36 millones de toneladas. Se trata de la recolección más baja desde la sequía del período 2008-2009.
La última cosecha de soja finalizó con una producción total de 36 millones de toneladas, lo que refleja una caída interanual del 37,4% por la sequía, que provocó una pérdida de unos u$s 4.200 millones en la campaña.
Se ubica como la recolección más baja desde la sequía del período 2008-2009 -había sido de 32 millones de toneladas-, según el Panorama de la Bolsa de Cereales porteña.
La cosecha de soja finalizó sobre una superficie implantada de 18.000.000 de hectáreas.
El reporte señaló que el cultivo arrojó pérdidas de 1,2 millones de hectáreas sembradas y un rendimiento nacional de 2.140 kilos por hectárea, un 33% por debajo al cierre del ciclo previo que fue de 3.190 kilos por hectárea promedio.
En el ciclo 2008-2009 se habían recolectado 32 millones de toneladas y en esta campaña el rinde medio nacional reflejó la ausencia de precipitaciones durante momentos críticos del ciclo fenológico que hizo que no se pudieran cumplir las estimaciones iniciales de una producción de 54 millones de toneladas.
A partir de las estimaciones del Instituto de Estudios Económicos de la Bolsa de Cereales, el Producto Bruto de la cadena de la soja será un 26% menor en 2018 respecto del nivel que hubiese alcanzado si se cumplían las expectativas vigentes al inicio del ciclo agrícola, pasando de 16.213 millones de dólares en el escenario inicial a 12.010 millones de dólares en la sequía.
Por lo tanto, según los datos, en términos de la economía en su conjunto, la disminución de 4200 millones de dólares en el valor agregado de la cadena de la soja representa una caída del 0,6% en el PBI argentino para 2018 estimado por el FMI.
Estos resultados responden fundamentalmente al fuerte déficit hídrico estival que afectó durante más de ocho semanas la mayor parte de la región agrícola nacional, comprometiendo la condición del cultivo en sus etapas reproductivas críticas.
Por otro lado, de acuerdo con el PAS, las buenas condiciones del tiempo y la finalización de la cosecha de soja, permitió lograr un buen avance en la cosecha de maíz con destino grano comercial.
Durante los últimos siete días la cosecha llegó al 63% del área apta, marcando un avance intersemanal de 7,4 puntos porcentuales.
En cuanto a los rindes recolectados, se mantienen por debajo de
las expectativas iniciales en la provincia de Córdoba.
Respecto de la campaña de fina 2018-2019, las labores de
siembra de trigo y cebada continúan avanzando en todo el país y ya
se lograron implantar más de 5.300.000 hectáreas con ambos
cereales.
Los lotes de trigo más avanzados en su ciclo fenológico
transitan etapas de espigazón y se concentran principalmente en la
región del NOA, donde la condición de humedad varía entre regular
y escasa.
En paralelo, sobre los núcleos cebaderos del sur de Buenos
Aires la condición de cultivo es adecuada y el cereal se encuentra
entre emergencia y diferenciación foliar.
fuente: cadena3