El homicida y su víctima sufrían severos problemas de adicción
La Policía está tras los pasos de un tal “Macaco”, un joven con problemas de adicción que está acusado de matar a un amigo en el barrio La Milagrosa de Banda del río Salí.
El domingo a la siesta, vecinos de Fabián Modesto Perea, de 26 años les avisaron a sus familiares que el joven estaba tirado en un pasillo del humilde caserío. Fueron hasta ese lugar y lo encontraron desmayado y pálido. Como habría tenido problemas de adicciones, pensaron que había sufrido una sobredosis. Sin embargo, cuando lo revisaron, le encontraron una herida en el pecho y un sangrado en el oído izquierdo.
Los familiares lo trasladaron al Centro de Salud, donde llegó sin vida. Los médicos le sinformaron que la víctima había sido atacada con un elemento que introducido por el oído izquierdo. Mientras recibían el diagnóstico, la Policía recorría el barrio en busca del autor del hecho.
Los vecinos habían visto a la víctima y al amigo consumir bebidas y probablemente drogas hasta pasado el mediodía. Dijeron también que ambos comenzaron a discutir. También señalaron que la víctima golpeó a “Macaco” con una botella y salió corriendo del lugar. Siempre según esa versión, Perea regresó para hablar con el sospechoso y en ese momento recibió el brutal ataque.
Los policías comenzaron a buscarlo sin éxito por todo el barrio. Los parientes del sospechoso les explicaron que el joven tiene problemas psicomotrices por haber recibido años atrás un fuerte golpe en la cabeza y que es normal que consuma drogas.
Personal de la División Homicidios, al mando de los comisarios Diego Bernachi y Jorge Dip, en medio de un importante operativo de seguridad, llegó hasta el lugar donde se produjo el hecho. Allí encontraron el destornillador que habría sido utilizado para perpetrar el crimen y otros elementos probatorios.
“Macaco”, según confiaron fuentes judiciales, escapó después del brutal ataque. Los familiares prometieron presentarlo ante la Justicia una vez que lo encuentren.
fuente:La gaceta