Ganó por 15 punto a Anabel Fernández Sagasti, la diferencia más holgada desde el retorno democrático. “No nos gusta el populismo”, celebró.
El radical Rodolfo Suárez venció por al menos 15 puntos a la kirchnerista Anabel Fernández Sagasti y se convirtió en el nuevo gobernador de Mendoza, en un triunfo del actual mandatario Alfredo Cornejo que logró provincializar los comicios y salir ileso de la derrota de Mauricio Macri en las primarias.
“Acá no nos gusta el populismo. Es malo. Es bueno gobernar con austeridad. Tenemos que llevar a los mendocinos y a los argentinos a un lugar mejor”, fue su escueto saludo en la bunker de Cambia Mendoza, montado en el hotel Aconcagua de la capital.
Su victoria había sido confirmada poco después de las 20 horas por Fernández Sagasti. “La diferencia es irremontable. He llamado al próximo gobernador para felicitarlo. Estamos muy contentos porque sabíamos que nuestro Frente venía construyéndose y conseguimos una gran cantidad de votos”, sostuvo desde el bunker montado el estadio Arena de Maipú, con los primeros datos enviados por sus fiscales.
Unos minutos antes, el ministro de Economía de Mendoza, Martín Kerchner, había garantizado el triunfo de Suárez y de los principales distritos que eligen intendente. “Es gran elección, diría histórica, donde los mendocinos han revalidado la continuidad de un Gobierno de Alfredo Cornejo por las tendencias que estamos viendo”, sostuvo antes que se conociera un sólo dato oficial.
Desde el mediodía, desde la gobernación dejaban trascender bocas de urna que anticipaban una victoria por hasta 10 puntos del intendente de la capital, que el peronismo tuvo que desmentir 15 minutos después de cerrados los comicios. “Hay información de nuestros fiscales que habla de una elección muy pareja, muy reñida y estamos muy entusiasmados”, había dicho Lucas Illardo, jefe de campaña de Elegí Mendoza. Una hora después fue desmentido por la candidata.
Con la mayor parte de las mesas escrutadas Suárez se imponía por 50 a 34, por lo que Fernández Sagasti está cerca de retener los 35 puntos acumulados en la interna peronista pero lejos de llegar a los 40 que obtuvo Alberto Fernández en las primarias presidenciales.
Lo intentó con varias visitas del candidato a presidente, la última el martes junto al resto de los gobernadores peronistas para anunciar medidas para su hipotético gobierno. La ciudad aún está empapelada de afiches con los rostros de la senadora y el candidato de Todos.
Suárez creció 7 puntos respeto al acumulado de las primarias de Cambia Mendoza y consiguió triunfos apabullantes en los departamentos del Gran Mendoza como Las Heras, Guaymallen, Godoy Cruz y Luján de Cuyo. Pero logró pelear mano a mano en los dominados por intendentes peronistas como Maipú y San Rafael, una de las ciudades que recorrió Fernández junto a la candidata derrotada.
La ola radical también le permitió retener las intendencias, con victorias contundentes como la del sobrino del gobernador Ulpiano Suárez en la Capital, por 63 a 25, que detuvo la racha de derrotas del partido centenario en las ciudades cabeceras. También ganó por más de 20 puntos en Godoy Cruz y por 35 en Guaymallén. La UCR sólo perdía Santa Rosa y peleaba mano a mano La Paz.
La victoria también le garantiza al nuevo gobernador el control de ambas cámaras del Congreso, aunque seguirá lejos de los dos tercios necesarios para aprobar cada emisión de deuda. El peronismo lo ayudó en sus primeros tres años de gestión, pero luego se negó y complicó las finanzas de Cornejo.
El nuevo gobernador ignoró a Macri en toda la campaña, no lo recibió cuando visitó Mendoza el 15 de julio. Nunca lo mencionó y empezó cada debate aclarando que las políticas nacionales no eran parte de esta elección. Como adelantó LPO, a los festejos no se sumó el presidente sino el gobernador de Jujuy Gerardo Morales y el diputado Martín Lousteau, quienes aclararon que se trataba de una victoria provincial y de la UCR.
El dato de color fue que Horacio Rodríguez Larreta envió una comitiva integrada por el ministro de Gobierno Bruno Screnci Silva, el secretario general Fernando Straface y el de relaciones con las provincias, Gerardo Siniscalchi. Larreta, Lousteau y Cornejo no ocultan sus intenciones de dominar la oposición si Alberto Fernández es presidente.
fuente:lapoliticaonline