Cecilia Gordillo, la hermana de Lucas, el principal acusado del crimen de Pablo Maximiliano Mariotti, aseguró que Rolando Morán, uno de los tres aprehendidos por el asesinato del joven de 36 años, tenía vínculos con políticos de la provincia; además, contó que habría más involucrados en la investigación judicial.
“Sé que “Roly” trabajaba para un político (llamado) Gerónimo. Él era una especie de puntero de esta persona. Iba a distintas casas, hablaba con la gente y les preguntaba qué es lo que necesitaban”, le contó la mujer esta mañana a La Gaceta.
Según los investigadores, se cree que el sospechoso se movía en la zona de Villa 9 de Julio. Además, en Facebook, Morán tenía varias imágenes con personajes de la política; sin embargo, antes de entregarse a la Justicia el domingo, todas las fotos de su muro desaparecieron.
También en las redes se descubrieron fotos de Morán y de Lucas Gordillo, el principal sospechoso que todavía no puede ser capturado, con los integrantes del Clan Toro, grupo que está sospechado de dirigir una red de narcomenudeo.
Sin embargo, el representante legal de la familia desmintió vinculación alguna con los señalados como autores del homicidio.
Cecilia también contó que en las próximas horas podría haber más sospechosos del crimen de Pablo. “Están las pruebas en el celular que le entregué a la fiscal (Mariana Rivadeneira). Son dos, y uno de ellos vino a mi casa el jueves a la noche (por el 6 de este mes) manejando la moto de ‘Maxi’”, expresó.
“Roly” es el cuarto sospechoso del crimen del Pablo Maximiliano Mariotti. Junto con Lucas Gordillo, era hasta el domingo los dos prófugos de la Justicia. Los investigadores creen que los acusados, más Solange Manzanares Beltramino, habían planeado ingresar a la vivienda de la víctima, en calle La Madrid al 1300, para sustraerle dinero y títulos de propiedad, entre otros elementos.
Ahí se habría producido el deceso del joven, de 36 años, entre el jueves 6 y viernes 7. A ellos se habría sumado luego Yamil Salis para trasladar el cuerpo en una camioneta. Habrían llevado el cadáver hasta el taller de Olleros al 100. Allí, apareció el cuerpo de Mariotti, que estaba enterrado en la parte de adelante de la propiedad. Después, abandonaron la moto Yamaha de Mariotti en la ruta 9.
Por el momento, no se sabe cuál fue el nivel de participación de cada uno de los cuatro sospechosos, pero sí se piensa que además de matarlo, los acusados intentaron quedarse con todas las propiedades que tenía la víctima. En la casa donde fue sepultado, en una mochila, lo investigadores encontraron una carpeta con los títulos de las propiedades que tenía Mariotti.
FUENTE: LAGACETA, CONTEXTO