Es para cancelación de deudas con contratistas y proveedores del sector público, que servirá para pagar impuestos provinciales.
El gobernador Schiaretti anunció este lunes la emisión de un título de cancelación de obligaciones que la provincia usará para pagarles deudas a sus proveedores y contratistas y que podrá ser utilizado para el posterior pago de impuestos provinciales.
Desde la gobernación remarcaron “no es una cuasimoneda” porque no está pensada para transacciones comerciales y que también “podrá utilizarse como garantía en bancos, SGR, emplearse para presentarse a licitaciones y ser una alternativa de inversión para los cordobeses”.
Lo cierto es que las cuasimonedas fueron en un comienzo este clase de letras para la cancelación de pagos de impuestos y deudas con el Estado que adquirieron la función dineraria cuando también empezaron a ser aceptadas en comercios por falta de pesos. Por ejemplo, las Lecop también empezaron siendo un título transferible de cancelación de deudas.
Por la falta de liquidez que golpea a todas las provincias tras la abrupta caída de la recaudación, se espera que en breve se sumen otras provincias como Sante Fe y Chubut, que hace rato tenían en estudio la emisión de cuasimonedas para el pago de salarios y deudas con proveedores.
De momento, la “cuasimoneda” cordobesa no se utilizará para el pago de salarios, pero al ser transferible no se descarta que los proveedores sí los usen como medio de pago a sus propios proveedores.El mismo Schiaretti la presentó en las redes sociales: “La Provincia de Córdoba lanzará un título para cancelar deudas con proveedores. Será transferible y podrá utilizarse para cancelar deudas tributarias vencidas hasta el 29 de Febrero de este año”, dijo en twitter.
Esta herramienta permitirá aliviar en algo la gran caída de la recaudación que afecta a las finanzas públicas, y al permitir compensar deudas y acreencias tendrá un impacto positivo en el sistema económico cordobés”, remarcó.
La provincia de Córdoba tuvo una caída de la recaudación del 14% interanual en el mes de marzo producto de la paralización de la economía por el coronavirus y del 26% si se la compara con el último marzo sin recesión, que fue el de 2018. Con un cuarto menos de la recaudación y los gastos crecientes, el gobierno optó por una inyección de liquidez desde la provincia para movilizar la economía local.
En abril ninguna provincia espera tener mejores números que en marzo y aunque muchas confían que la pandemia postergará las paritarias, saben que no va a ser sencillo llegar a mayo sin que se discutan nuevos aumentos con los empleados estatales. Por tal motivo, ya antes del coronavirus muchas provincias tenían en mente esta opción, e incluso dos estudiaron la posibilidad de hacerlo mediante criptopatacones.
fuente:lapoliticaonline