Tras casi 20 horas de espera en el límite entre Tucumán y Santiago y con una fila de más de 8 kilómetros, los camioneros perdieron la paciencia y pasaron por encima los puestos de la policía ingresando sin ningún tipo control a la provincia.
“Pasaron todos. Queremos pasar. No es posible que haya un solo médico haciendo los tests para diez kilómetros de fila. Somos seres humanos, pasamos frío, hambre, sed, de todo“, dijo uno de los camioneros que ingresó a Tucumán evadiendo los controles y poniendo en riesgo a policías y personal de Salud.
Los vehículos tomaron toda la ruta y avanzaron, incluso por las banquinas. Personal policial alcanzó a tomar el dato de algunas patentes de los camiones.
FUENTE:LOSPRIMEROS