El presidente Alberto Fernández se reunió con su par chino Xi Jinping en su visita por el país asiático en la que cerró un acuerdo de inversión y cooperación económica y la incorporación de la Argentina a la Iniciativa de la Franja y la Ruta de la Seda.
“Si usted fuera argentino, sería peronista”, le dijo Fernández al líder chino cuando la reunión de casi una hora -celebrada en la madrugada de horario argentino- en el Gran Palacio del Pueblo estaba concluyendo.
Con la mayoría de los mandatarios que se encuentran en China para participar de la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de invierno que se desarrolló el viernes, Xi viene manteniendo encuentros protocolares de unos 20 minutos, pero con Fernández el encuentro se extendió durante casi una hora.
En la reunión, que los voceros calificaron como “distendida, fructífera y muy cordial”, Fernández agradeció al mandatario chino la cooperación en el marco de la pandemia de coronavirus, con el envío de vacunas chinas Sinopharm a la Argentina.
En tanto, Xi le dijo a Fernández que había escuchado con interés su discurso de julio del año pasado, cuando participó virtualmente de la Cumbre del Partido Comunista de China y los Partidos Políticos del Mundo en su condición de presidente del Partido Justicialista.
A continuación, el mandatario argentino hizo un repaso de la historia del peronismo en la Argentina y de cómo esa fuerza política “siempre intentó hacer un país más industrializado, con distribución del ingreso, y con más fuerza de la clase trabajadora”.
Según fuentes oficiales, el Presidente también contó que “cada tanto venía un golpe militar o neoliberal que hacía retroceder y que el último caso había sido el Gobierno de Mauricio Macri, que había tomado un préstamo con el FMI”.
Asimismo, Fernández solicitó a Xi Jinping que la Argentina integre el BRICS, el grupo de economías emergentes integrado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica. El Presidente ya había planteado este mismo punto ante Vladimir Putin en la reunión que mantuvieron en el Kremlin.
El encuentro con Xi se realizó a días de que se cumplan 50 años del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre Argentina y China.
En ese sentido, Fernández compartió una anécdota con el mandatario asiático: en los años ’50 el presidente argentino Juan Domingo Perón le pidió a su ministro de Comercio Exterior que gestionara el envío de alimentos a China. Se trataba de Antonio Cafiero, el abuelo del actual canciller Santiago Cafiero, que integra la comitiva presidencial en el marco de la gira internacional.
Tras su encuentro con Xi Jinping, el presidente argentino visitó las instalaciones de la empresa tecnológica Huawei, en Beijing, y conversó con sus directivos “sobre la importancia de la innovación” y los proyectos de esa compañía en redes inteligentes, movilidad y transición energética.
Tras la gira por China, Alberto Fernández y su comitiva partieron a las 8 de la Argentina hacia Madrid, donde pasará la noche para mañana seguir rumbo a Barbados, el último destino de su gira presidencial, que lo llevó en primer lugar a Rusia.
Fernández llegará mañana a Bridgetown, la capital de la isla caribeña de Barbados, como presidente de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), que encabeza desde el pasado 7 de enero.