El canciller le pidió al país vecino que recuerde el tratado firmado en 1984. El mapa en cuestión incorporaba como propios 5 mil kilómetros cuadrados que le pertenecen a Argentina.
Santiago Cafiero ratificó en el Senado la queja argentina por un mapa diagramado por la Armada de Chile que incorpora como propios espacios que le pertenecen a la Argentina. El ministro de Relaciones Exteriores pidió ante la Comisión de Relaciones Exteriores y Culto que el país vecino respete el Tratado de Amistad celebrado tiempo atrás.
El mapa en cuestión fue elaborado por el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada de ese país, que incorporó como propios espacios del territorio argentino. Cafiero lo rechazó y explicó que el 27 de agosto del 2021 se hizo “esta primera aproximación, este primer reclamo de parte de Chile”.
Recordó que “tiene que ver con un trabajo que inició Argentina y que esto es un reflejo de eso”.
En agosto, PERFIL se hizo eco de la queja argentina por el mapa que abarca un área de 5 mil kilómetros cuadrados al sur del Mar de Drake y de las islas del Cabo de Hornos, sobre territorio de Argentina. Ese material incluye la proyección de una pretendida plataforma continental chilena que se superpone con un sector de la plataforma continental argentina.
Cafiero explicó en su exposición que la relación bilateral con Chile tiene como piedra angular al Tratado de Paz de 1984.
“La reacción de Chile fue tardía”, dijo Cafiero
“Teniendo en cuenta este Tratado, la Argentina avanzó en 2009 en Naciones Unidas en la Comisión de Límites. Allí avanzó con la limitación y nuestro país, al no tener objeciones de parte de Chile, las presentaciones de Argentina fueron aprobadas y es el mapa bicontinental hoy como está y son las delimitaciones que tiene todo nuestro territorio y están aprobadas por ley y registrado en la Comisión de Limitación de Naciones Unidas, es decir, está avalado internacionalmente”, aseguró el funcionario.
En esa línea, durante la comisión Cafiero estuvo acompañado por Gabriel Fucks, subsecretario para América Latina, y Guillermo Carmona, secretario de Malvinas, Antártida y Atlético Sur.
“La reacción que tuvieron (en Chile), a priori, fue tardía porque el mecanismo de Naciones Unidas implica que haya consensos o acuerdo, es decir, que si Chile cuando estábamos trabajando sobre la delimitación del año 2009, hubiera presentado una queja o una observación el proceso se hubiese detenido, pero nada de esto sucedió”, apuntó el caciller.
Por eso, agregó, se llegó a una ley votada en el Congreso que estableció el actual mapa continental. “Recién ahí nació el reclamo de Chile y la presentación sobre su plataforma marítima y continental y recién en el 2021 hace una presentación”.
Ahí, Cafiero recordó que el expresidente chileno Sebastián Piñera “trató de generar una instancia de arbitraje que era obsoleta porque los tiempos y plazos habían pasado”. Y agregó: “Se hicieron notas periodísticas para generar sentido en la prensa chilena sobre el tema y eso derivó en un decreto supremo 95 donde se hace la presentación del Gobierno de Chile sobre su mapa y se extiende sobre Tierra del Fuego”.
La referencia fue a que Piñera afirmó que su gobierno iba a reclamar ante las Naciones Unidas la soberanía en un territorio de 5.000 kilómetros cuadrados, conocido como la medialuna al sur de Tierra del Fuego.
Este territorio está incluido por Argentina en su propia plataforma, dado que sostiene que es un sector del espacio marítimo que forma parte del Patrimonio Común de la Humanidad de conformidad con la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (CONVEMAR).
fuente: PERFIL