La medida se implementará a partir de este viernes en el ámbito de la Capital, pero podría extenderse a toda la provincia, comunicó Aetat.
Son 600.000 los usuarios que se verán afectados en toda la provincia.
La Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat) comunicó que, a partir de este viernes, se prestarán servicios bajo la modalidad “de emergencia” en el ámbito de la Capital como consecuencia de la crisis que afronta el sector y de la imposibilidad de cubrir los costos operativos.
La entidad consignó que se procederá a “la reducción de la prestación del servicio a la mínima expresión” y a “la suspensión, por dicha causa, del personal de conducción”, todo esto, por tiempo indeterminado.
En caso de que se mantenga este escenario, remarcó Aetat, estas disposiciones “se extenderán a las líneas provinciales en general”.
“Ante la crítica situación por la que atraviesa el transporte público de pasajeros en todo el interior del país, y de la que no están exentos el municipio de la Capital y el resto de la provincia de Tucumán, nos vemos en la ineludible necesidad de recurrir a medidas extremas y no deseadas, a fin de resguardar el transporte en general, a los usuarios y las fuentes de trabajo”, señalaron Roberto Orell, presidente de la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán, y César Atim, secretario general de la entidad.
Los representantes de las líneas de ómnibus advirtieron que, en este escenario, se “aplicarán las normas que rigen la actividad como servicio de emergencia”.
“Estas medidas serán tomadas en la órbita municipal capitalina a partir del viernes 12, a las 0”, señalaron. Y adelantaron que, si no surgen alternativas para superar esta coyuntura, la reducción en las frecuencias se extenderá a toda la provincia.
Los argumentos del empresariado
Los empresarios señalaron cuatro razones para fundamentar la decisión de operar bajo la modalidad de emergencia.
En primer lugar, indicaron que se encuentran “ante la imposibilidad de hacer frente al costo real del servicio público de transporte de pasajeros”.
Consignaron a continuación la “imprevisibilidad” que afecta al sector y “la asimetría en las compensaciones tarifarias nacionales”.
Añadieron luego “el aumento de los insumos de la actividad”, como el gasoil y los repuestos”, cuyos valores alcanzaron porcentajes “totalmente irracionales”, indicaron en Aetat.
Por último, señalaron que están en curso “paritarias imposibles de asumir”. Estas negociaciones se llevan adelante en el ámbito nacional, y los empresarios de todo el interior ya anticiparon que no cuentan con los recursos necesarios para sostener un nuevo incremento salarial en los términos requeridos por la Unión de Tranviarios Automotor (UTA).
“En resumen, estamos ante la imposibilidad total del sustento del transporte público de pasajeros y de nuestra actividad empresaria”, señalaron Orell y Atim en el escrito.
Semana clave
Ayer, en diálogo con LA GACETA, el directivo de Aetat Jorge Berretta había anticipado que esta sería una “semana de definiciones” para la continuidad del servicio de ómnibus en Tucumán.
Por un lado, los empresarios tienen el compromiso de saldar los salarios de los choferes y demás afiliados a UTA entre el jueves y el viernes. Sucede que el plazo caducó el cuarto día hábil, pero el gremio aceptó una prórroga “porque saben la realidad que estamos viviendo”, aclaró Berretta.
En paralelo, existe un pedido por parte de la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (Fatap) al gobierno de Javier Milei para que cese “el tratamiento desigual e inequitativo en perjuicio del interior”.
FUENTE:LAGACETA