
Desencadenado por la inestabilidad económica y la acelerada inflacionaria, los jubilados con haberes medios perdieron un 45% de su poder de compra entre 2021 y fines de 2023
Durante los últimos años, la pirámide de los haberes jubilatorios viene en picada. Las distintas medidas compensatorias, principalmente el pago de bonos por parte del Ejecutivo, produce un efecto regresivo en la relación entre aquellos que cobran las jubilaciones máximas y mínimas. La implementación de los bonos, que si bien tiene como objetivo proteger a la población que cobra el haber mínimo, que son también las más vulneradas ante la caída del poder adquisitivo de los ingresos jubilatorios, afecta la equidad y sustentabilidad del sistema previsional en su conjunto.
Con una inflación que acumuló un 1146,7% entre enero de 2020 y diciembre de 2023, los ingresos previsionales tuvieron subas de entre 590% y 742,8% (considerando los bonos cobrados en cada momento, en algunos casos). El resultado es que el valor real de los haberes jubilatorios del sistema general de la Anses cayó entre un tercio y casi un 45%.
Muy lejos quedó, con esas cifras, la promesa de la gestión de Alberto Fernández y de Cristina Kirchner, de recomponer las jubilaciones y restituir el 19,5% perdido en los años previos. A la fuerte caída del poder adquisitivo -que solo en los dos últimos años fue de 40% para quienes no cobraron bonos-, en los últimos años se agregó un achatamiento de la pirámide de ingresos, en desmedro de quienes más aportes hicieron al sistema y con un efecto de desaliento a la formalización de la economía, que es una necesidad urgente para el sistema previsional.
fuente:LOSPRIMEROS