En medio de la escalada de violencia narco en Rosario, el Gobierno nacional analiza promover las cárceles privadas, vender las que se encuentran en ciudades y, con esos fondos, construir sedes penitenciarias en terrenos alejados de los centros urbanos.
Así lo reconoció el presidente Javier Milei, y reveló que el proyecto forma parte del programa de seguridad de su gestión.
“Hay cárceles que están en medio de la ciudad, en terrenos de real estate de mucho valor en términos inmobiliarios. Básicamente, estamos pensando en vender esas cárceles y con esos fondos construir nuevas cárceles de máxima seguridad alejadas de la ciudad. Estamos trabajando en incorporar cárceles privadas”, aseguró el mandatario este miércoles, en declaraciones a radio Mitre.
Milei mencionó al Complejo Penitenciario Federal de Devoto, ubicado en el homónimo barrio porteño, como uno de los edificios a ser vendidos. Sin embargo, deslizó que la iniciativa abarcaría a distintos centros penitenciarios a lo largo y a lo ancho del país.
El presidente expuso el asunto en medio del recrudecimiento de los crímenes con sello narco en Rosario, donde la última semana fueron asesinados los taxistas Diego Celentano y Héctor Figueroa; el colectivero Marcos Caiola y el playero de estación de servicio Bruno Bussanich.
Milei aludió al despliegue de fuerzas federales en la ciudad santafesina e hizo hincapié en la reforma de la Ley Nº 24.059 de Seguridad Interior, que busca potenciar el rol de los militares en zonas de conflicto. “Acabamos de armar una ley para ampliar las facultades que pueden tener las fuerzas armadas en acción de narcoterrorismo”, mencionó.
fuente: contexto