Aseguró que una victoria oficialista en octubre representaría “una estabilización de la República”, consideró que el Gobierno “está aprendiendo de sus errores” y dijo que decidirá con el presidente, a solas, si es o no candidata.
La diputada nacional Elisa Carrió aseguró que hay “un clima de extorsión” y le apuntó al PJ, cuya característica, dijo, es “ser extorsivo”. Le apuntó también a La Cámpora y particularmente a Sergio Massa, a quien acusó de haber sido “todo el año extorsivo”.
También consideró extorsión la de los docentes, advirtiendo que “este sistema lleva a la destrucción definitiva de lo mejor que tuvo la Argentina, que es la escuela pública”.
Entrevistada para el ciclo “Conversaciones”, de La Nación, consideró “determinante para la Argentina” las elecciones de octubre, por cuanto si gana Cambiemos “hay previsibilidad”. “Una victoria en la provincia de Buenos Aires y en la Capital, da previsibilidad a la inversión. Lo que dicen adentro y afuera es: yo quiero saber si eso que vimos estos días vuelve o se va alejando. Y esta es la prueba de octubre”, sostuvo Carrió. Para ella, “una victoria en octubre es una estabilización de la República”.
La diputada considera que “el Gobierno está aprendiendo de sus errores”, y de todos consideró al de las tarifas el más importante. Admitió que hubo otros errores no forzados, pero no los consideró “decisivos”, mas consideró que hubo puntos a favor del Gobierno más importantes, como la baja de impuestos.
Elisa Carrió consideró que su relación con Macri es “personal, de sinceridad”. Se admitió “ingobernable” y por eso admitió que “hacemos semiacuerdos que después no se cumplen, nos reímos y comemos asados”, y le reconoció al presidente que “escucha” y estimó que “el cariño es mutuo”.
“Creo que él es mucho más hábil de lo que podrían ser los radicales”, apuntó.
Respecto de su rol en octubre, reiteró que aún no está decidido, que lo decidirá con el presidente después de Pascua. “Si tengo que jugar, y es imprescindible, arriesgo mi salud -agregó-. Lo quiero hacer por la república, no quiero ser mascarón de proa de corruptos. Pero si me lleva la vida, me lleva la vida”.
Las alternativas para su candidatura son provincia de Buenos Aires y Capital Federal, apuntó.
Calificó a los jueces de “especuladores” y “oportunistas políticos”, advirtiendo que “si ven que el presidente pierde la legitimidad, dicen, ‘a ver si vuelve Cristina, no la toquemos’. No hacen justicia”. Excluyó de Comodoro Py solo a “tres o cuatro jueces más serios. El resto está en una especulación permanente y ahora va a haber un interregno”.
Anticipó que avanzarán con el juicio político contra Alejandra Gils Carbó , para “mostrar el desastre de lo que hizo”, sin importar tanto el resultado, “porque justicia es poner en evidencia a la señora procuradora”.
Asimismo reiteró que después de Semana Santa presentará un pedido de juicio contra Ricardo Lorenzetti, por mal desempeño y comisión de delitos en el ejercicios de la función. Señaló al respecto que “el presidente me pidió un año y se lo di. Pero ya no tengo tiempo, estoy sufriendo operaciones terribles de gente que fue mandada por el presidente de la Corte, presiones de todo tipo. Me manda a presionar, llama al Poder Ejecutivo diciendo lo va a plantear internacionalmente”.
Respecto de Cristina Fernández de Kirchner, puso en duda que vaya a presentarse en las próximas elecciones, y estimó que eso lo decidirá a último momento. Y sobre su situación judicial, remarcó que “la decisión de Macri es que si hubo delito, se investigue. Acá no va a haber impunidad”.
Tras deslizar críticas a Franco Macri, Carrió estimó que entre ella y su padre, Mauricio Macri “se va a quedar conmigo”. Señaló que “si tiene que elegir entre el padre y yo, se va a quedar conmigo, porque quiere ser un gran presidente”.
fuente:ELPARLAMENTARIO