
Este jueves cayó en Salta Carlos Marcovich, el prófugo más buscado de Tucumán. En 2003 quemó vivo a un hombre y le puso sus documentos para fingir su propia muerte. Se fugó tras la condena, cayó en 2009, le dieron domiciliaria, violó a una menor y se volvió a fugar.
Como su historial delictivo digno de Hollywood, Marcovich fue hallado de una manera increíble: durante su fuga formó una nueva pareja con quien vivía en la provincia vecina bajo un nombre falso, pero una familiar de la mujer habría buscado sus datos en Google y se dio con su terrorífico prontuario. Le contó todo a la actual novia del criminal y esta última entonces lo denunció ante la Policía, indica La Gaceta.
Su historial delictivo comenzó 20 años atrás, cuando la Policía encontró un auto incendiado y un cuerpo incinerado en su interior, camino a La Aguadita. Por los documentos que se encontraron en el lugar, se trataría de Carlos Marcovich, de 43 años, empleado del Siprosa y de una empresa de medicina prepaga.
Pero después se supo la verdad: había quemado vivo a Juan Carlos Carrizo, de 42 años, un vagabundo conocido y querido por los vecinos del barrio de La Ciudadela, para simular su propia muerte y cobrar un seguro de vida de unos $ 10.000 con el que pretendía saldar sus deudas.
Marcovich fue condenado a prisión perpetua. Después de varios años (no se pudo establecer cuántos), por padecer una enfermedad terminal, se le concedió un arresto domiciliario. Se fue a vivir a la casa de una mujer con la que tenía una relación sentimental, en Banda del Río Salí. Pero en 2017 esta lo acusó de haber violado a su nieta, menor de edad, y el hombre desapareció.
fuente: contexto