Desde este viernes, la municipalidad de Yerba Buena comienza a implementar la medición de velocidades de circulación vehicular utilizando radares.
Serán unidades móviles de mano, que se pondrán en operación en las avenidas Presidente Perón, Aconquija y Solano Vera; en el Camino de Sirga y el Camino del Perú (en todos estos casos la velocidad máxima permitida será de 60 kilómetros por hora).
También operarán en las calles Aragón, Las Rosas y Boulevard 9 de Julio, con un límite de 40 kilómetros por hora. La aplicación de los radares irá acompañada con controles de alcoholemia y revisión de la documentación requerida para circular.
En el caso de la avenida Perón, el secretario de Seguridad del municipio, Mauricio Argiró, recordó que el tramo que va del paredón hasta la rotonda de Horco Molle es considerado zona de velocidad disminuida, debido a que cuenta con camineria para la práctica deportiva.
Los radares se implementarán de manera tal que, cuando un conductor exceda los límites, los inspectores lo detendrán más adelante con el fin de analizar el caso, que puede terminar con una simple advertencia o una multa cuyos montos el funcionario no quiso revelar.
Para que la multa, en caso de aplicarse, sea válida, la Ley Nacional de Tránsito requiere que la ubicación del radar esté claramente señalizada y que el conductor en exceso de velocidad sea detenido por un agente, quien deberá identificarse debidamente.
Los radares (o cinemómetros) deben estar homologados y certificados por el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), organismo que además debe realizar controles cada seis meses, y los datos del que se haya usado para aplicar una multa deben aparecer en el acta de infracción.